29 de septiembre de 2007

Night Mary

En la Universidad de Cornell van a impartir un curso sobre Monstruos en la cultura occidental, dentro del Master en Humanidades. Desde luego es difícil elegir entre toda la gama de posibilidades. allí han optado por Drácula y los Expedientes X. Sin duda hay muchos más, dependiendo de la definición que a la palabra "monstruo" queramos dar. Esta semana me he centrado en la lectura de unos comics la mar de interesante. Empezando por este relato de terror, del que me imagino que La Celda, peli de Jennifer López, tiene mucho de esta historia: una chica que es capaz de meterse en los sueños ajenos. Porque por monstruos podemos entender demasiadas cosas, desde deformidades como El hombre elefante a cualquiera de los cuentos del Bestiario de Cortázar.
Y para monstruos, donde cabe la dudo de quiénes son tales freaks, si los pobre muchachos o sus padres, con esa rabia sin motivo, en los Freaks de Hertlands. Me encanta que no den explicaciones de por qué sucede lo que sucede. Los hechos asombrosos no tienen por qué tener una lógica. Y me gustan los dibujos, donde los rostros de los personajes son tan expresivos como actores, y los colores nos muestran el aire tan axfisiante como la propia narración nos cuenta. Por eso me gustó menos La casa del confín de la tierra. Basado en un relato de Lovecraft queda mal hilvanado, ambiguo e ilógico.
Mucho mejor es la narración de Ojo, donde una niña adopta a un bicho realmente feo, y adopta a la madre del bicho como suya propia, pobre huerfanita. Uma historia sobre la muerte, la infancia y las relaciones (no amorossas, claro, sino en general). Porque los niños no eligen a las amistades por las mismas razones que los adultos, desde luego. Pero tampoco pueden controlar las encesidades afectivas en un momento dado. Interesante planteamiento y más interesante el desarrollo psicológico de la trama.
El ladrón de días es el otro de la colección de Made in Hell de Norma Editorial, buenos dibujos y buena historia. Creo que estos cómics realzan valores y características de los personajes difíciles de desarrollar, quizá por eso nos atrapan, y quizá por eso nos lleva a terminar leyendo sobre héroes. Ya iré investigando sobre esto pero desde luego niños con un valor y una inteligencia poco usual, con una capacidad de adaptarse y tomar la inicativa, decisiones arriesgadas, que ya me gustaría verlo en la vida cotidiana. Quién sabe si esto termine llevando a una investigación en profundidad. Estaría interesante...

24 de septiembre de 2007

23 de septiembre de 2007

Neverwhere de Neil Gaiman

Tener la llave de la realidad para entrar y salir, llegar a Madriz de abajo, o a Londres de abajo, ver lo que hay debajo del Retiro o pasear por estaciones fantasmas. La historia interminable, Mirrormask, El Mago de Oz, Borges, Millás o Auster. Realidad o ficción, una de las grandes dicotomías de nuestro tiempo. Sueños que se confunden con la realidad o que son tan reales que nos invaden, las fronteras se rompen y en mi mano aparece un pétalo de rosa al amanecer, un pétalo que arranqué a la luz de la luna en un pantano lejano. Monterroso, Cortázar, Cooper. Seguramente conozcas más autores, más títulos que juegen con lo real maravilloso, con lo mágico, aquellos que piensan que nos merecemos un mundo con algo más que cemento, tráfico y malos modales. He puesto pétalos de rosa blanca adormanado mi mesa en el comedor, una lámpara de papel de corte oriental en la esquina y no ha parado de llover sobre el mar, mezcla de un azul turquesa y un gris ceniza casi imposibles. He lído a Gaiman hasta agotarme la vista, hasta dolerme las rodillas de estar acurrucada en mi sillón de cuero negro. La soledad de la tarde del domingo ha sido bella con estos elementos. Andas lejos pero tengo tu libro en mis manos y me gusta sentir así tu calor. La traducción ha sido realmente mediocre (traducir her o his con el neutro suyo provocando en castellano una ambigüedad de la que el inglés carece es estúpido), la narración contiene elementos manidos: el personaje externo que será la clave, la heroina de la que depende todo, la lanza con la que matar a la bestia, el traidor, el engaño, los malos salvajes, elementos que recuerdan a los relatos fantásticos tradicionales, a Wilow, Dentro del Laberinto, Cristal Oscuro o La guerra de las Galaxias.
Lo reconozco, a pesar de la edición, me encantan estas historias.

19 de septiembre de 2007

Las ovejas de Glenkill de Leonie Swann

Aparece muerto un hombre esa mañana en el prado. Sus ovejas claman justicia, auqnue no están seguras de lo que significa esa palabra. Por suerte el muerto, su pastor, les leía cada tarde una novela. Y les explicaba algunas palabras para que lo entendieran todo mejor. Por eso deciden investigar quién le mató, quién le clavó una pala en medio del pecho.
Excelente primera novela de esta joven, tiene mi edad, alemana. Sólo un pequeño error de traducción, al comienzo del segundo capítulo. Y memorable el diálogo en que deciden que Satán no puede ser el culpable, es un burro aparentemente pacífico, en todo caso Dios, que, por alguna extraña razón, no le cae bien a ninguna oveja.
Un libro divertido, atrevido, y que me quita una sugerencia que me hizo un amigo el otro día: que un gato narre una historia. Lo malo de intentar ser muy original es que sólo se le puede ocurrir a uno y el primero gana. Creo que en las ciencias pasa algo parecido...
Muy recomendable, por lo menos un siete.

15 de septiembre de 2007

Death Proof de Tarantino

¿Os acordáis de esas pelis de acción, de artes marciales o de detectives que cuando terminaban sólo se os ocurría seguir jugando con vuestro hermano? Lo peor eran las de artes marciales, claro, porque terminaba cobrando y llorando. En mi caso, mi hermano me sacaba cinco años y una cabeza y media. Pues ver una peli de Tarantino me deja ese sabor de boca, el de querer un poco más, el de aprender a dar mamporros para parecerme a alguna de las chicas fuertes, ingeniosas y tremendamente atractivas que aparecen. Me ha encantado el detalle de grabar con color Deluxe, de mantener la estética, de la multitud de referencias y autoreferencias sobre cine, películas, por supuesto, y diálogos propios, para muestra la foto. Así que cuando la veáis no os perdáis detalle, porque hay guiños para todos lo públicos, a Kill Bill varias veces, pero también a las otras.
No me cabe ninguna duda, este tío es un crak.

2 de septiembre de 2007

En Picado de Nick Hornby

¿Qué es lo que hace que te levantes cada mañana? ¿Qué es lo que te impulsa para seguir viviendo? ¿Y qué es lo que te lleva a lo alto de una azotea para querer saltar desde ella? El nihilismo más absoluto me dice que dejar pasar los días es una manera de esperar a la muerte. Mi abuelo así me lo decía poco meses antes de morir. Trabajas para pagar las facturas, el alquiler, tus libros, un poco de ropa y una cena de vez en cuando. Dejas pasar los días sin que nada pase, almacenando experiencias, algún conocimiento nuevo y mcuha rutina. Puede ocurrir que vivas una situación extrema, algo horrible, y que pierdas cualquier visión de futuro. ¿Pero de qué futuro hablamos?
Hornby no escribe una novela con la que me identifique con algún personaje, en absoluto. Probablemente no tenga nada en común con ninguno de los cuatro personajes de la novela. O quizá sí. Quizá sea el músico que sin su grupo y sin subir a un escenario ya no tine sentido su vida. En realidad eso da igual. La novela es ese Hornby de personajes confusos, que no saben a dónde van ni de dónde vienen, que en un momento de sus vidas se lo tiene que replantear todo. Es el Hornby de Alta Fidelidad, con algo menos de música entre sus páginas pero con aquellas referencias que demuestran lo melómano que es. Y debo reconocer que me encanta ese finísimo humor inglés que me hace sonreir. Un humor inteligente y lleno de juegos de palabras. Así que si podéis leedlo en inglés.
Puntuación: ummmm, un seis, lo que no deja de ser una puntuación bastante alta si en mi escala suponemos que un diez serían Cien años de Soledad y El nombre de la rosa.